Las almendras garrapiñadas me traen muchos recuerdos de la Semana Santa, Navidad, ferias y fiestas. Y aunque es cierto que ya no se encuentran con tanta facilidad como antes, aún se siguen vendiendo en algunas pastelerías o quioscos. Por esta razón es tan importante mantener las recetas tradicionales, así que hoy te mostramos como hacer almendras garrapiñadas en casa, con una receta muy fácil y rápida de preparar.
La receta más tradicional de las almendras garrapiñadas utiliza la misma cantidad de almendras y azúcar, pero esto va en cuestión de gustos, si no las quieres tan dulces puedes reducir la cantidad de azúcar en casa. ¡Vamos con la receta para hacer almendras garrapiñadas en casa!
Almendras Garrapiñadas
Ingredientes
- 250 gramos Almendras
- 200 gramos Azúcar
- 100 ml Agua
Elaboración paso a paso
- En primer lugar, colocamos una sartén grande a fuego medio-alto, vertemos el agua, esperamos que comience a hervir y añadimos el azúcar. Damos vueltas hasta que veamos que el azúcar se ha disuelto, y añadimos las almendras.
- Bajamos el fuego y removemos bien con una cuchara de madera para que todas las almendras se impregnen del almíbar, y seguimos cocinando sin dejar de remover. Poco a poco el almíbar de ira cristalizando y cambiado de color convirtiéndose en caramelo, tal y como vemos en la foto.
- Seguimos sin dejar de remover en ningún momento y con el fuego suave, hasta que veamos que se empieza a formar una costra de caramelo cristalizado sobre las almendras.
- En algunos momentos parece arena, es normal, no dejes de remover, ahora es cuando el caramelo comienza a volverse brillante.
- Cuando veamos que las almendras están bien bañadas con una capa brillante de caramelo oscuro, las retiramos del fuego.
- Las colocamos sobre una bandeja con papel de hornear, sin amontonarlas, dejando espacio entre ellas con ayuda de la cuchara.
- Por último, una vez que estén frías, ya podemos comer nuestras almendras garrapiñadas hechas en casa, o conservarlas en bolsas o botes herméticos.
Notas
Trucos y consejos para hacer las almendras garrapiñadas en casa
- Utilizar almendras crudas. La receta tradicional es con almendras crudas con piel. Pero si quieres hacer la receta con las almendras peladas, puedes pelarlas fácilmente con la técnica de escaldar para posteriormente pelarlas. Para ello, coloca las almendras en un colador, pon una cazuela con agua a cocer, y cuando esté hirviendo, introduce el colador con las almendras 30 segundos. Sácalas y pélalas.
- Una vez que el azúcar comience a convertirse en caramelo, es importante bajar el fuego, ya que si no los bajamos se comenzarán a formar pegotes de almendras que serán muy difíciles de separar.
- Siempre que trabajemos con el azúcar para hacer caramelo, tenemos que tener cuidado de no pasarnos con la temperatura, ya que si se quema amargará.
- Te recomendamos usar una cuchara de madera o similar para dar vueltas a las almendras.
- Una vez estén frías, puedes conservar las almendras garrapiñadas en bolsas de plástico, papel de hornear, etc. pero guárdalas en un lugar fresco para evitar que el caramelo se derrita.
- La sartén donde hemos hecho la receta, estará llena de caramelo. Para limpiar la sartén te recomendamos poner a hervir agua en ella para que el caramelo se disuelva y desaparezca. Puedes hacer lo mismo con la cuchara de madera que hayas utilizado.
Las almendras garrapiñadas en Semana Santa y fiestas
Las almendras garrapiñadas son un fruto seco que se acompaña de caramelo de azúcar para darle un contraste dulce delicioso. Dice la tradición que en la semana santa de muchas ciudades de España, como Zamora o León, no pueden faltar. De hecho, es común, que los propios cofrades de las procesiones de semana santa compartan con conocidos almendras garrapiñadas a su paso. Por lo que la almendra garrapiñada ha pasado a ser algo con lo que compartir momentos en fechas señaladas, como Semana santa, Adviento o Navidad.
Hay varias variedades de almendra que se pueden utilizar en la receta, pero en la zona de Castilla y León donde son típicas, se utiliza la variedad de almendra largueta, que es un poco más larga que el resto de variedades.
Una receta dulce sencilla a la que hay que darle cariño
Como has podido ver, la preparación de las almendras garrapiñadas es muy sencilla, con tan solo tres ingredientes obtenemos un dulce o postre perfecto. Tan solo tenemos que hacerlas con mimo y cariño, impregnando el azúcar por las almendras hasta que comience a caramelizar, siempre con cuidado de no quemar el azúcar, ya que el sabor pasaría de dulce a amargo. Y por último, ya con las almendras garrapiñadas listas y frías, podemos conservarlas en bolsas o en cucuruchos de papel de cera u hornear.
La capa de caramelo hace que se conserven durante mucho tiempo, siempre que las conservemos en un lugar fresco y envasadas. Así las tenemos listas para comer en cualquier momento.